Día del Atlas Medio desde Fez. Viaje a través de los fértiles campos de la campiña, contemplando los impresionantes paisajes por el camino. Maravíllese ante las magníficas montañas del Atlas, especialmente cuando están adornadas con nieve. Haga una parada en el encantador pueblo bereber de Imouzzer, famoso por su festival de la manzana. Continúe hasta Ifrane, a menudo denominada «la Suiza de Marruecos», donde podrá disfrutar de una pausa para tomar café. Explore Azrou, un pintoresco pueblo bereber enclavado en pleno Atlas. Disfrute de las vistas panorámicas y almuerce en un restaurante local. No pierda la oportunidad de encontrarse con los juguetones simios de Berbería en el encantador bosque de cedros. Al final del día, regresaremos a su riad de Fez.
Nuestro viaje de un día al Medio Atlas desde Fez comienza, después de encontrarnos en el lugar que habíamos acordado. Estaremos recorriendo los fértiles campos campestres, y disfrutando de los paisajes. Después de eso, conducir durante algún tiempo. Luego veremos las montañas del Atlas, que ofrecen una hermosa vista. Especialmente cuando están cubiertos de nieve. Luego, haremos una parada en el pueblo bereber llamado «Imouzzer», que es conocido por su fiesta de la manzana a fines de septiembre. Después de eso, nos dirigiremos hacia la ciudad de Ifrane, «el olor de Suiza en Marruecos«, donde tenemos la posibilidad de hacer una pausa para tomar un café.
Después de disfrutar de las vistas de esta hermosa ciudad situada en las montañas del Atlas. Continuamos hacia Azrou, que significa «roca» en tamazight (el idioma de la gente local), disfrutamos de las vistas panorámicas del Medio Atlas, hasta llegar al pueblo bereber de Azrou. Después de eso, almorzaremos en el restaurante y descansaremos antes de conducir junto al bosque de cedros, donde se puede ver a los monos de Berbería saltando entre las ramas de los bosques de cedros. Esta es una buena oportunidad para tomar fotografías en este mágico lugar. A última hora de la tarde, regresamos a su riad en Fez.
Sí, Marruecos es generalmente seguro para los turistas. Al igual que cualquier destino, es esencial tener cuidado y ser consciente de su entorno, especialmente en las zonas concurridas y lugares turísticos.
La mejor época para visitar Marruecos es durante la primavera (marzo a mayo) y el otoño (septiembre a noviembre) cuando el clima es suave y agradable. Sin embargo, cada temporada ofrece una experiencia única, por lo que depende de tus preferencias.
Si bien Marruecos es un país relativamente liberal, es respetuoso vestirse modestamente, especialmente en áreas más conservadoras. Para las mujeres, es aconsejable usar ropa holgada que cubra los hombros y las rodillas. Los hombres normalmente pueden vestirse de manera informal.
Los tours por el desierto pueden variar en duración, desde una sola excursión hasta aventuras de varios días. Las opciones populares incluyen viajes de una o dos noches, lo que le permite experimentar la belleza del desierto sin comprometerse a un viaje prolongado.
La cocina marroquí es diversa y sabrosa. Algunos platos imprescindibles incluyen tagine (estofado de cocción lenta con carne o verduras), cuscús (sémola al vapor servida con carne y verduras), pastilla (una pasta salada generalmente llena de paloma o pollo), y harira (una sopa abundante que se sirve a menudo durante el Ramadán).
Marruecos ofrece una gama de alojamientos para todos los presupuestos y preferencias, incluyendo resorts de lujo, hoteles boutique, riads (casas tradicionales marroquíes convertidas en casas de huéspedes), kasbahs (casas tradicionales fortificadas), campamentos en el desierto y hostales y casas de huéspedes asequibles.
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